Tras un buen resultado contra el Cacereño y con las ganas que teóricamente tenía la peña se intentó montar el bus, al final sólo 23 tíos apuntados, un palo para todos los que querían ir y como el mono de fútbol y de desplazamiento era muy grande para unos se decidió ir en coche particular.
El sábado a las doce de la mañana nos reunimos 5 coches para ir a Huelva y tras "desayunar" y sin que algunos se hubieran acostado todavía, nos encaminamos hacia tierra onubenses. Se llenaron los depósitos de gasofa y lo que no era gasofa, y cada cuál cogió por donde le dio la gana… y maricón el último.
En el coche que fui yo decidimos ir por la autopista, aunque hubiera que pagar, y detrás de nosotros el coche del Dani y su trupe de colgaos con Ikurriñas. Nos paramos en una especie de venta en la autopista y allí se decidió que el tifo que íbamos a hacer en Huelva sería de rollos de papel (que previamente fueron saqueados de dicha venta), y tras un corto trayecto en el que "el niño" nos contó varias veces el último episodio de Los Floders llegamos a Huelva sanos y salvos nos encaminamos hacia el estadio, bueno, mejor llamarlo Centro Comercial, pues es eso lo que parece. Y nada más sentarnos en las mesas de un bar de dicho estadio nos atacan, sí nos atacaron, pero LOS MOSQUITOS, no veáis la banda que nos atacó, no nos dejaron hasta que nos fuimos y se ensañaron con varios miembros.
Decir que los tres coches de Psikósis llegaron un poco más tarde porque cogieron por la nacional, eso sí, cuando llegaron no pararon de dar la nota en plan simpático, y es que los Psikósis ya se sabe, nada más que hace falta uno para hartarnos de reír que fue precisamente lo que hicimos en toda la estancia en Huelva.
Tras fotos de rigor la peña se apalancó detrás del fondo sur del ¿estadio?, y a partir de ahí no se paró de beber. Destacar al Alberto de Sestao que no paraba de darle al patxarán y cada vez estaba más ciego. La peña iba a por priva a cada momento, y en uno de esos viajes trajeron un balón de plástico amarillo, el cachondeo fue monumental y los balonazos eran constantes hasta que se embarcó el jodío balón dentro del estadio (no volvimos a ver el balón). Ah!, de los ultrillas onubenses ni se veían ¿?, nos visitó o más bien pasaba por allí el presidente del Cádiz, al cual un "irresponsable" mancho de cerveza, desde aquí pedimos disculpas a Manolo García, no fue nuestra intención pero es que estábamos contentos con el Cádiz.
La llegada del Cádiz fue muy buena y se quedaron alucinados con la peña que había. Tras cantar un poco de carnaval, y a falta de cinco minutos nos metimos para dentro y colgamos pancartas y banderas, el Julián puso la pancarta de la Sección Madrid y una antifascista, mientras poníamos las pancartas pasó un trenecito parecido al que pasa por el paseo, insultándonos, pasamos de ellos, pero a la segunda vez que pasaron se le tiró unas latas. Hicimos el mencionado tifo de rollos de la venta y se cantó algo, muy poco porque nadie se ponía de acuerdo por el ciego tan impresionante que tenían, además disfrutábamos con el juego del Cádiz y en el mejor momento metió el Huelva, acto seguido el clásico gilipollas que va al fútbol a dar la nota y que se mete con una de las colegas que venían de Psikósis y se le intentó dar un correctivo. La madera se cosca y como no, como somos los malos de siempre, la policía cargó contra nosotros. Nosotros como a parte de malos no somos gilipollas respondemos a la carga y ya se calmaron un poco los maderos. Tras eso el imbécil anteriormente citado volvió y por poco más otra ostia se lleva, después de eso la cosa se calmó mucho porque metió el Cádiz. En el bar vendían cerveza con alcohol, y claro, arrasamos con toda la que había y tras pedir la hora al árbitro… EL GOLAZO DE RAFA, no veáis que alucine, botes por aquí, cánticos por allá, saltos y salida del estadio a ritmo de los duros antiguos que bailó hasta el de Sestao. Hay que reseñar lo que hicieron los Psikósis a Jamón Gus, le quitaron el calzoncillo con pantalones y todo y lo colgaron en la valla (el calzoncillo naturalmente, no a Jamón Gus).
Nos encaminamos hacia la salida de los jugadores y allí había mucho aficionado onubense y "peligrosos" ultras de 11 ó 12 añitos que alucinaban con las paridas que decíamos, al final cantaron con nosotros el "Sevilla Mierda" y "quisiera ser tan alto…", fue muy emocionante y nos despidieron al grito de Cádiz, Cádiz!!.
Y tras charlar un poquito con los jugadores cada uno a su coche y para Cádiz. Hay que decir que el coche que iba yo, nos picó la curiosidad y nos pasamos por el sitio que apedrearon el bus del Cádiz hace dos temporadas y mira por dónde había allí un grupillo de unos 12 ultrillas (alguno bastante grande y con camiseta fascista incluida) que nada más vernos salieron por patas, no nos bajamos ni del coche. Al final nos bajamos y Julián de Madrid salió detrás de ellos, cosa imposible de coger. Nos quedamos un ratillo por los alrededores pero no aparecieron más por allí. Tras fumarnos unos canutos y beber unas cervezas nos fuimos para Cádiz, a la cuál llegamos a eso de las once de la noche. Nos fuimos al Foco para comentar con la peña el partido, y esto es todo lo que ha dado el maravilloso desplazamiento a Huelva que se saldó con tres puntos para nuestro Club de los amores, hasta el próximo que aún no sabemos cuál será. NOS VEMOS!!.
P.D.- Dar las gracias al Diario de Cádiz por destacar este desplazamiento, GRACIAS POR NADA HIJOS DE PUTA, QUE OS FOLLE UN ELEFANTE!!.