De auténtica vendeta se puede calificar la encerrona planeada al más mínimo detalle por el Sevilla contra el Cádiz C.F. Lo ocurrido en Coria ha sido toda una demostración del poder del Sevilla usado una vez más contra nuestro pueblo. Como tantas veces, otra vez los intereses de los gaditanos han sido pisoteados y se vuelve a repetir la historia.
Cuando me refiero a "encerrona planeada al más mínimo detalle" quiero citar varios detalles previos al partido. Por ejemplo, la directiva sevillista no da la hora y lugar del encuentro hasta el miércoles antes del partido, con lo que no se podía organizar a tiempo ningún tipo de excursiones en autobuses y se juega en Coria, hasta donde no se puede ir en tren, ante lo cual sólo queda el desplazamiento en coche particular.
Consecuentemente el número de seguidores cadistas se ve reducido considerablemente, si además añadimos que desde el sábado antes del partido Cádiz - Talavera ya se sabía que el precio de las entradas era de 2.000 ptas., más baratas las hay en primera división, está claro que los ánimos de ir se enfriaron casi totalmente. Otro detalle que notamos nada más llegar fue la presencia de los ya tristemente conocidos de la Reserva de Sevilla, ahora Unidad de Intervención Especial de la policía.
Todos conocemos de aquí, en Cádiz, como se comportan estos señores cuando tratan a los Biris y cuán diferente nos tratan a nosotros. Y en Coria no iba a ser menos, y eso que los Biris eran unos 60 y nosotros sólo 10.
A pesar de saber de que todos conocéis el comportamiento partidista de la FOP de Sevilla, quiero demostrarlo con hechos palpables. Antes del partido en las calles cerca de Coria íbamos 3 de nosotros con el coche, cruzándonos con los Biris que en ese momento eran unos 40 incluidos los que nos atacaron más tarde. En el lugar no había ni un solo policía y ellos a pesar de su abrumadora mayoría no sólo no atacaron sino que además no nos insultaron…
Sin embargo cuando una vez comenzó el partido, los mismos tres fuimos al bar tranquilamente ya que éste estaba situado en el sector cadista separado por un cordón policial, fuimos atacados en un número de 8 a 3, por unos sin bufandas con candados y correas con hebillas grandes. Nos defendimos con dos cojones y una cadena e inmediatamente cargaron los monos. A mí y a otro nos dieron de palos y un tercero escapó. Dos de los tíos, entre ellos habían tres o cuatro Skinhead, se llevaron sendos cadenazos en la cabeza, así la próxima vez se lo pensarán más.
Con todo esto queda claro que los ¿Biris? no hacen nada si no es el respaldo de los "señores" y que estos actúan de manera descarada contra Cádiz y sus gentes.
Más tarde permitieron el destrozo de coches de Cádiz y nos denunciaron a dos de nosotros por el más elemental de los derechos, defenderse.
En otros aspectos de la encerrona está la actuación arbitral a la que no me voy a referir ya que no la presencié, pero que todos sabemos por los medios de comunicación que barrió descaradamente para el lado sevillista, hundiendo al Cádiz C.F., con lo que la encerrona estaba completada.
Ya no se trata de unos cuantos niñatos llamados Biris, es mucho más, es un complot contra Cádiz, liderado por el caramono de Luis Cuevas. Así que hay llegado la hora de reflexionar seriamente en todo lo ocurrido y obrar en consecuencia.