Otro desplazamiento de Brigadas y como se preveía INVASIÓN AMARILLA, aunque al final no nos sirvió de nada porque el equipo la volvió a cagar. Decir que os vamos a contar lo que es el desplazamiento y las valoraciones que la pongan otros, nuestra opinión es que fue una encerrona por parte de la directiva del Jerez en colaboración con la policía, pero vamos a ello.
La concentración de gente se hizo en el estadio Carranza pues a las 12 h el filial se jugaba un importante partido, y se decidió ir a animar al filial y después pa'Jerez. Como había disparidad de opiniones algunos decidieron salir a la una en tren (sobre unos 50), estos tuvieron problemas con el revisor que les obligaba a pagar el tren, como todos se negaron los echaron en la estación del Puerto, eso sí, después de haber pintado parte del tren y de la estación del Puerto. A la media hora de expulsarlos del tren se volvieron a meter en otro tren (un Andalucía Express) así que el viaje les salió por el módico precio de 200 Ptas., llegaron a las 02:15 h a Jerez.
Nada más llegar se fueron a su bola y ningún "ultra jerezano" a la vista. Deambularon por las calles de Jerez encontrándose a algún gilipollas que gritaba "puta Cádiz" y que al ir a por él salía por patas (cosa muy bien aprendida de los sevillanos). Tras un rato se apalancaron en una plaza y allí estuvieron bebiendo, en ese intervalo aparecieron varios coches y motos a toda ostia, insultando, a lo respondieron con piedras y butanos contra ellos, lastimosamente los objetos no llegaron al objetivo. Eso sí, quedo claro que parte del grupo YA ESTABA EN JEREZ Y NO FUERON A POR ELLOS. ¿Dónde están esos cojones?. Tras otro rato volvieron a la estación (pasando de los maderos) para recibir al grupo principal de cadistas.
Tras contar lo que ocurrió con la primera avanzadilla, decir que el Cádiz B le ganaba por tres a cero al Jerez Industrial con regocijo general al caerse un juez de línea y salir del campo lesionado, en Segunda Aguada nos reunimos más de 300 cadistas dispuestos a partir, cánticos, cerveza y mucho jolgorio. Fue un asalto al tren que se empetó de bufandas amarillas. La peña cantando a toda ostia y el tren que bota al ritmo de "jerezano el que no bote", la peña desfasaba un montón, gente en los portaequipajes, quitando fluorescentes y más cachondeo.
Se subió peña en San Fernando y en El Puerto (buenos cadistas), mientras tanto nos descojonábamos con la peña corriendo de una punta a otra del tren para evitar al "pica", parecían escenas de Barrio Sésamo. Llegamos a Jerez (bonito pueblo GADITANO) y allí tras reunirnos con los del tren de la una nos fuimos para el estadio. El camino era corto de unos 15 minutos andando, llegamos a él dejando huella y ocupando toda la carretera, nos metimos por una calle lateral y los que iban primeros (unos 15 ó así) nos topamos de lleno con un grupo de unos 40 "ultras" der Jeré y estos empezaron a tirarnos piedras y palos sin llegar al enfrentamiento directo que era a lo que nos hubiera gustado llegar. Respondimos con piedras y nos fuimos por ellos, los cuáles ante la avalancha salieron por patas, decir que este fue el único enfrentamiento que hubo con un cara a cara, tras ir detrás de ellos estos se escabullen por una calle lateral y que tras ir tras ellos "sospechosamente" nos corta el paso una furgoneta de la Policía Nacional con material anti-disturbio preparado y arremeten contra nosotros, a lo cuál respondemos tirándoles de todo, entretanto los "ultrillas" der Jeré se reagrupan y vienen a tirarnos piedras aprovechando que los maderos están liados con nosotros, lo cual nos deja un balance de un par de chavales con heridas en la cabeza. Los maderos reaccionan y les tiran algún bote de humo y varias pelotas de goma también a ellos, pero de una forma muy mosqueante, parecía que no le querían dar cosa que con nosotros no ocurría. Hay que decir que la zona no era la adecuada para responder a las piedras que nos estaban lanzando, pues era una calle que estaba ocupada por las furgonetas de la policía y por el otro lado era un barrizal y si tratabas de ir por ahí te lanzaban pelotas de gomas. Así entre pelotazos y piedra va y viene estuvimos unos 20 minutos hasta que al final pudimos alcanzar la carretera y tirar a nuestro fondo. Por lo visto en ese intervalo los "ultrillas" der Jeré quisieron dar a Pichi y a Bermúdez (como no querían enfrentarse a nosotros pues cobardemente contra los jugadores de su ciudad que juegan en la capital de la provincia).
Tras pillar las entradas que nos faltaban hubo gente que entró y otros que nos dirigimos hacia la sede del Xerez Deportivo y nos pusimos a beber allí y algún "elemento" se dedicó a confiscar botellas de whisky y el chándal der Jeré que tenían allí en una exposición, el cual después quemaron en la grada. Decir que hubo peña que se fue de eskakeo y que pillaron a varios jerezanos a los cuales les dieron varios correctivos, y sin más contratiempos nos introducimos en el estadio.
El ambiente era increíble, más de dos mil cadistas cantando y animando sin parar. Del partido mejor no hablar pues como dijimos no entramos a valorar los resultados. Era descojonante el ver cómo volaban las sillas, por lo que se ve la peña pagó el mosqueo con los lavabos y las sillas, menos mal que el Cádiz no las tiene que pagar aunque la imagen del Club ha quedado muy mal.
El regreso pues otro tanto de lo mismo, la gente insultando y peleas con los maderos que nos ¿escoltaban? hacia la estación. De camino a la estación la peña se dedicó también a formar barricadas y a tirar piedras a los coches que nos insultaban. Una vez en la estación pues poca cosa que decir, que los "valiente ultrillas" le dieron a una chavalita que estaba allí con su madre sin tener nada que ver y que le abrieron la cabeza (otra cosa que han aprendido de los sevillanos, las acciones cobardes de pegar a viejos y niños).
Tras esperar al tren de las nueve y montarnos sin pagar nos tiraron un par de piedras que partieron dos cristales, a lo cual le dimos al freno de emergencia y salimos unos pocos a por ellos, la policía nos reprimió con disparos de pelotas de goma a lo cual volvimos al tren tras unos 20 minutos parados, volvimos a la estación de Jerez y en la cual se montaron los antidisturbios para que dejáramos tranquilos los frenos y de ahí para la capital. Al final como sabéis la historia es la siguiente: que siempre somos nosotros los malos. ALLÁ SE PUDRAN.