Llegó el ansiado partido tras 30 años sin enfrentarse Cádiz y San fernando. Al final nada ocurrió y todo quedó en tablas, tras un masivo calentamiento por parte de gente de La Isla, al final no ocurrió nada sólo un buen juego del Cádiz (algún periolisto que no sabemos qué partido ve) y una lección de cómo hay que animar a un equipo por parte de l@s brigadas que se desplazaron a La Isla. El resultado fue un poco engañoso pues nuestro equipo mereció algo más.
El previo del partido fue algo así: tras rechazar las BRIGADAS un intento de escolta innecesario por parte de la directiva y policía, sobre todo para que vayamos todos juntos. La gente fue en varios grupos y de muy diversas maneras, ya sobre las 6 de las tarde se empezaron a ver las primeras bufandas amarillas por el Bahía Sur, tras privar un poco algunas anécdotas graciosas como la de recorrer el recinto encima de un carro del Pryca y destacando la masiva presencia policial nos metimos para dentro.
Nada más entrar lo de siempre, cacheos masivos y reiterados por parte de la policía, nos ubicaron en un lateral del fondo completamente rodeados y eso que pagamos como todo dios, casi no nos podíamos mover y no digamos para ir a mear, no instalaron un bar para nosotros al cuál le jodieron la luz durante unos momentos, a parte de nosotros y en nuestro mismo fondo había unos 1.000 seguidores amarillos, que se hicieron notar muy poco. Durante el partido no parábamos de animar y tras el gol del empate del Cádiz hubo varios palos debido al ímpetu de varios de nosotros y el excesivo celo de varios números de la unidad crea-disturbios allí destinados, al final la cosa no paso a mayores.
Terminó el partido y todos contentos nos dejaron un tiempo dentro del estadio para evitar incidentes que no ocurrieron. Como fuimos de diversas maneras decir que el grupo más numeroso se para la zona de La Ardila para pillar el bus cortando el tráfico sin que la policía hiciera nada y de ahí pa'casa.