Esta temporada supone un periodo importantísimo para el fútbol gaditano: se inaugura el estadio Carranza y se crea el trofeo con el mismo nombre; sin embargo el Cádiz, en su vuelta a 2ª división, sólo consigue mantenerse, escapando por poco de la promoción de descenso.
El Cádiz se estrena en la liga con el siguiente equipo; Goyo, Varela, Cuartango, Bernal, Tejedor, Pilongo, Mari, Paquito, León, Nené y Ayala I. El primer partido lo pierde fuera, en el campo del Jaén, empezando de mala manera el campeonato. Poco a poco el equipo iría mejorando y al final de la primera vuelta se despegaría de la cola gracias a tres victorias muy importantes, 6-1 al Plus Ultra , 0-2 al Betis en Sevilla y 0-1 al Mestalla.
El equipo se coloca cerca de la cabeza y la afición se empieza a ilusionar con el ascenso, hasta que el España de Tánger nos goleara en Carranza 0-4 con un equipo formado por jugadores como Bolea, Granados o García Ojeda que serían fichados por el cuadro amarillo la siguiente temporada.
A raíz de este encuentro se agrava la crisis y el Cádiz encaja ocho derrotas consecutivas, desapareciendo así todas las posibilidades de ascenso posibles. Así se llegó al trascendental partido contra el San Fernando. Se debía ganar a los isleños para quedar fuera de todo peligro, y no solo se le ganó sino que se le goleó por 4-1 lo que inspiró a algunos el temor que los vecinos se hubieran dejado ganar, lo que fue desmentido por los protagonistas.

EL PRIMER TROFEO
En agosto de 1955 se celebra el primer Carranza. En el participan el Sevilla y el Atlético de Portugal, ya que las dos primeras ediciones se celebran a partido único y con el Sevilla como protagonista, equipo "vecino" que atraía a numerosos seguidores hasta el estadio.
El partido acaba con un resultado favorable para el Sevilla (2-1) que de todas formas no lo tuvo fácil para derrotar a los portugueses, que se adelantaron en el marcador. El alcalde de Cádiz José León de Carranza entregó el trofeo al capitán del Sevilla Bustos.